Sónsoles Ónega se cortocircuita ante sus prejuicios
Una asociada de StopAbolición, Nelly, trabajadora sexual y gestora de habitaciones en alquiler en Manilva, Málaga, se puso en contacto con nosotros para denunciar que una familia con la que comparte patio interior (no portal) le agrede reiteradamente con destrozos diarios, pedradas y gritos, amenazas directas cuchillo en mano. Pusimos en contacto a Nelly con varios medios, de los que sólo Antena3 respondió finalmente.
En la conexión en directo, incluso emitiendo en vivo la crudeza de las pedradas, insultos y los gritos navaja en mano, fue sorprendente la reacción de la conductora y mayoría de tertulianos. A pesar de que la reportera Pepa Romero constató la mala fe de sus vecinos y su soberbia al pensar que el reportaje era para hostigar a su vecina, los colaboradores de Sonsoles y ella misma hacen el ridículo al no saber cómo posicionarse ante un piso de citas que objetivamente recibe VIOLENCIA mientras las autoridades no hacen nada por detenerla.
Desde nuestra asociación no podemos sino denunciar el esperpendo que supone el tratamiento dado del caso denunciado en un medio de gran audiencia. A Sonsoles se la ve nerviosa, intentando sacar chistes absurdos de la situación (comparando la piedra con el adoquin de Albert Rivera, aludiendo a la condición del hijo de del agresor como antiguo cliente) y sin capacidad de afrontar que se constata una agresión objetiva contra una propiedad donde si, se ejerce trabajo sexual.
Es insultante que los tertulianos se pregunten en directo por las hipotéticas molestias a la convivencia de la denunciante cuando tienen delante un grupo violento amenazante y que enseña armas. Sólo demuestra un fuerte prejuicio fruto del propio tratamiento distorsionado de los medios a la actividad. Hay cientos de locales y pisos donde se ejerce trabajo sexual que nunca han dado ninguna molestia a ningún vecino ni han sido objeto de denuncias de ningun tipo. Si sólo conoces lo que emiten los medios puede parecer raro, pero es la realidad de una actividad que ejercen decenas de miles de personas en España a diario y regulada en el País Vasco y Cataluña.
Por otro lado queda patente que si la reacción policial y mediática a la presencia de trabajo sexual ya es así sin ser una actividad ilegal, cuando las leyes abolicionistas estén en vigor sólo las mafias y los grupos violentos albergarán la actividad. Ello agrandará sin duda sus recursos y capacidad de acción con el perjuicio que supondrá para todos. Un impacto incalculable. Recordemos las dificultades policiales de Francia y Suecia en la actualidad.
A continuación detallamos en twitter las reacciones una por una del programa.
