Asesinato de Geraldine en París. ¡Transfobia y miedo a morir en Francia!
Traducido desde: https://strass-syndicat.org/meurtre-de-geraldine-une-transphobie-et-une-insecurite-ubuesques/
Geraldine. Trabajadora sexual asesinada en Francia
El pasado martes 9 de julio, Geraldine, una trabajadora sexual trans peruana de 30 años, fue apuñalada y asesinada en su apartamento del distrito 16 de París. Llevaba apenas dos años en Francia y trabajaba como acompañante para ayudar económicamente a su madre y a toda su familia. Como muchas compañeras, ella simplemente quería ganarse la vida, no perderla. El presunto asesino se entregó a la policía y explicó que se sintió “engañado” y entró en pánico cuando descubrió la identidad trans de Geraldine, lo que evidencia la naturaleza transfóbica de este crimen.
El supuesto “engaño” sobre el sexo de una trabajadora sexual nunca puede ser una excusa para asesinarla. Los motivos que expresa el asesino además de inaceptables plantean algunos interrogantes. Para apuñalar a Geraldine, el autor de los hechos tenía que estar en posesión de un arma punzante, pero un cliente normal no acude a una cita con una trabajadora sexual armado de ese modo. Esto es menos creíble aún si tenemos en cuenta que los anuncios de acompañantes son explícitos y los clientes contactan a las mujeres trans con pleno conocimiento de su identidad. Es por ello que creemos que el atacante seleccionó como víctima deliberadamente a una trabajadora sexual trans migrante. Lamentablemente todavía existen sectores de la sociedad y del sistema legal que fomentan la creencia de que ciertos grupos de personas no tienen el mismo derecho a la vida y a la seguridad.
Anteriormente, el 5 de julio, Angelina, otra mujer trans de 55 años, fue asesinada con un hacha por su pareja en el apartamento conyugal, y el 28 de junio nuevamente se produjo otro brutal ataque transfóbico en Pigalle, en este caso el atacante huyó dando por muerta a su pareja. En febrero, una trabajadora sexual trans fue atropellada intencionalmente por un automovilista después de que ella se negase a subir a su automóvil. A finales de marzo de 2024, un hombre sospechoso de haber violado a varias decenas de trabajadoras sexuales trans durante varios años en el Bois de Boulogne fue puesto en prisión preventiva tras otra violación.
Los ataques desde colectivos TERF (acrónimo para Trans-Exclusionary Radical Feminist, que en su traducción literal al español significa "Feminista Radical Trans-Excluyente"), la promoción que reciben por parte de la extrema derecha, la propuesta de ley Les Républicains contra las transiciones de género de menores e incluso las declaraciones del presidente Macron sobre los cambios de sexo calificadas de "espantosas", generan un contexto de transfobia que es la causa de la normalización del odio desatado contra las personas trans y especialmente las mujeres trans.
Desde hace una semana, circulan vídeos en las redes sociales de organizaciones de extrema derecha donde ciertos sujetos parecen divertirse atacando con balas de airsoft a trabajadoras sexuales en el Bois de Boulogne. Esta situación no es nueva: hace dos años, trabajadoras sexuales trans fueron blanco de balines de plomo en Lyon. En este vídeo se hizo visible la violencia perpetrada diariamente en el Bois de Boulogne ante la indiferencia de los medios de comunicación. Los medios de comunicación prefieren negar la dignidad humana de las mujeres trans y su verdadera identidad, incluso cuando son asesinadas, como es el caso del canal BFMTV, que en una retransmisión en directo, tituló: “La escort asesinada por ser hombre”. El sesgo de los medios de comunicación, las caricaturas, el espacio dado a los artículos y foros transfóbicos, son responsables de una deshumanización que se traduce en rechazo familiar, violencia y asesinatos.
La inseguridad que experimentan las trabajadoras sexuales también está vinculada al contexto político represivo. Durante el juicio en primera instancia por el asesinato de Vanesa Campos en enero de 2022, el abogado Nefali señaló al investigador que los imputados comenzaron a robar a las trabajadoras sexuales y a sus clientes en 2016, precisamente porque la ley denominada “lucha contra el sistema prostituciónal” , al penar a los clientes, les impide presentar denuncias. Cuando hace apenas dos meses se anunció el plan gubernamental contra la "prostitución" de Aurore Bergé, nuestras asociaciones advirtieron una vez más que una mayor represión contra el alquiler de apartamentos Airbnb o los desalojos por parte de las cadenas hoteleras provocarían más clandestinidad y, por tanto, más inseguridad.
Nos encantaría equivocarnos, pero los hechos están ahí. Solo en París, una trabajadora sexual es asesinada en promedio cada dos años:
- Geraldine, 30 años, apuñalada en París el pasado 9 de julio de 2024.
Nada ha cambiado desde las movilizaciones que se produjeron en 2018 tras el asesinato de Vanesa Campos. Siempre la misma indiferencia y el mismo silencio incómodo por parte de la clase política. Nuestras asociaciones se opusieron a la extrema derecha durante las últimas elecciones por razones obvias, por eso exigimos que el próximo gobierno se oponga a la transfobia. Los OQTF (medida de expulsión del territorio francés; implica la obligación para el extranjero de abandonar el territorio nacional, especialmente en caso de denegación de permiso de residencia o estancia ilegal) contra trabajadoras sexuales trans deben cesar. Al no poder regularizar a todos los inmigrantes indocumentados, las víctimas de la violencia deben poder al menos beneficiarse de un derecho de residencia aunque solo sea para organizar su defensa en Francia. Por último, queremos proclamar que ya es hora de despenalizar el trabajo sexual para mejorar la seguridad de las trabajadoras sexuales.
Las asociaciones de trabajadoras sexuales Acceptess-T, PASTT y STRASS, convocan a una gran concentración en la plaza de los derechos humanos (Place du Trocadéro), este martes 16 de julio a las 18 horas. Estará presente la madre de Geraldine, quien quiere exigir justicia para su hija y reclamar la aceptación de las personas trans y las trabajadoras sexuales.
Exigimos justicia para Geraldine y medidas políticas reales contra todas las formas de odio y violencia transfóbica.
¡Geraldine está con nosotros!
